Informe redactado por el 'Höherer Artillerie-Kommandeur 306' (subordinado al AOK 6) el 16.06.44 donde se responde al General der Artillerie sobre el empleo táctico de los Sturmhaubitzen (obuses de asalto) dentro de las brigadas de cañones de asalto.

Nota:
Resulta cuanto menos curioso que a pesar de haber sido introducido el Sturmhaubitze 42 en el otoño de 1942 el General de la Artillería no reclamáse a la tropa informes sobre las experiencias realizadas hasta finales de Marzo de 1944 (fecha en la que se publicó el número 15 de las Notificaciones de la Artillería y donde se solicitaban estos informes). Un motivo podría ser la reorganización llevada a cabo a comienzos de 1944 dentro de la Artillería de Asalto donde los batallones de cañones de asalto fueron reestructurados como brigadas.

16.06.1944

Höh.Art.Kdr. 306
Abt. Ia








En relación a:
OKH/GenStdH/Gen.d.Art(Ia), Nr.2100/44 geh. datado el 31.03.44
Notificaciones de la Artillería Nr. 15 - punto IX, 1.

Asunto:
Experiencias con obuses de asalto




De todas las brigadas de cañones de asalto que se encuentran en el sector de la Armada hasta estos momentos solamente una ha podido realizar experiencias con los obuses de asalto (estas se incluían en el primer documento).


En relación a A)

Debido al mayor calibre, la curvada trayectoria de vuelo y la lenta cadencia de fuego la misión de los obuses de asalto es en primer lugar el combate de objetivos de infantería, como p.e. nidos de ametralladora, sistemas de trincheras, objetivos cubiertos, así como el combate de infantería montada sobre carros de combate enemigos.

Debido a su lenta cadencia de fuego el obús de asalto es especialmente susceptible contra cañones anticarro y carros de combate. El combate de estas armas es tarea de los cañones de asalto.

De todo esto resulta una clara división del trabajo, siempre partiendo de la premisa que los cañones de asalto deben asumir la protección de los obuses de asalto.

Partiendo de esta comparación puede derivarse claramente su empleo táctico. Los obuses de asalto deben mantenerse en posiciones retrasadas en el centro. Como norma se han realizado las mejores experiencias con operaciones concentradas dentro de una batería. Como jefe de pelotón debe escogerse al mejor artillero disponible. Un firme mando es un requisito indispensable.

Operaciones concentradas de los tres pelotones de cañones de asalto dentro de la brigada deben ser consideradas como una excepción. Este tipo de operación podría ser provocada ó bien por una clara y evidente concentración del enemigo ó bien por el terreno. Tambien en este caso es absolutamente indispensable el más firme mando por parte del mejor artillero.

A pesar de que con el objetivo de aumentar la cadencia de fuego se saludaría la introducción de munición en forma de proyectiles se reconoce por motivos de más fácil producción y abastecimiento la ventaja del empleo de munición y cartuchos ya existentes.

En suma el obús de asalto ha operado de una manera excepcional y sería muy deseable que se consideráse el abastecimiento de obuses de asalto en la correcta relación.