Documento redactado el 10.01.1940 por el Generalmajor Haarde en representación del comandante de la 5. Panzer-Division donde informa al Gen.Kdo. XV AK sobre las experiencias realizadas durante la primera marcha de esta unidad bajo condiciones invernales.

Nota:
La marcha a la que se hace referencia en este informe, realizada en el marco del movimiento de la 5. Panzer-Division desde el este del Reich a la frontera belga, se llevó a cabo entre el 02.01. y el 04.01.1940 y transcurriría entre la zona de Hamm y la zona de Olpe, ambas localidades en la actual Renania del Norte-Westfalia. Las bajísimas temperaturas descritas en el informe, totalmente atípicas para la zona, convirtieron al invierno 1940/41 en el segundo más frío de la historia de esta región, unicamente superado por el invierno 1962/63.

10.01.1940

5. Panzer-Division

Abt. Ia/V Nr. 54/40 geh






Asunto:
Experiencias realizadas durante la primera marcha invernal

Dirigido a:
Generalkommando XV A.K.
Copia al Generalkommando VIII A.K.







La División entrega un informe sobre las experiencias realizadas durante la primera marcha invernal y cuyos detalles se exponen a continuación.


Observaciones preliminares:

El trayecto de marcha fué de aproximadamente 120 Km sobre terreno montañoso. Las carreteras sobre las que se llevó a cabo la marcha estaban cubiertas por una capa de hielo de aproximadamente 1 cm así como parcialmente por una capa de nieve de aproximadamente 5 cm. La temperatura exterior media fué de entre 20 y 25 grados bajo cero.


  1. Vestimenta de los conductores.

    Se han sufrido frecuentes congelamientos de las extremidades corporales (orejas, dedos, pies). Protectores de la cabeza no son suficientes. La parte superior de los guantes es demasiado fina.

    Medidas: adicionalmente orejeras y protectores en las manillas y volantes. General: frecuentes pausas.


  2. Lubricantes.

    Los hasta ahora empleados aceites para motores y engranajes poseen un punto de fluidez demasiando alto, razón por la que algunos motores de carro de combate no han podido ser arrancados ni con el dispositivo de arranque de inercia ni con el motor de arranque eléctrico y han tenido que ser remolcados, provocando frecuentemente averías en los embragues. En estos casos ha sido necesario mantener los motores calientes arrancándolos con frecuencia.

    Tambien los aceites de las transmisiones han sido tan espesos que p.e. en vehículos de ruedas remolcados a pesar de actuarse el embrague las ruedas no han rodado.

    Por estos motivos el abastecimiento de adecuados lubricantes de invierno es absolutamente imprescindible.


  3. Combustibles.

    1. Gasolina.
      Frecuente creación de hielo en los bidones. En los coladores de llenado de combustible se han constatado granos de hielo del tamaño de una avellana. Averías en las membranas de algunas bombas de combustible provocadas por la creación de hielo.

    2. Diesel.
      Durante la marcha el gasóleo en las tuberías, tambien en el compartimento del motor, se ha espesado de tal forma que las bombas de inyección han dejado de funcionar.
  4. Consumo de combustible.

    El consumo de combustible se ha doblado, en el caso de los carros de combate se ha triplicado. Para asegurar una constante capacidad de marcha y mantener calientes los motores arrancándolos frecuentemente la División precisa diariamente una tasa de consumo del 0,3, esto suponen aproximadamente 40.000 litros de combustible.


  5. Baterías.

    Como es sabido la capacidad de las baterías a bajas temperaturas disminuye rapidamente, razón por la que arrancar motores, incluso cuando estos han sido previamente girados a mano, es extremadamente difícil.

    Medidas:

    1. Calentar las baterías. Esto unicamente es posible si anteriormente no se ha ordenado asegurar la constante capacidad de marcha.

    2. Empleo adicional de baterías transportables con una mayor capacidad.
    Se ha constatado con frecuencia la descarga autónoma de las baterías. Motivo: Corrientes de fuga provocadas por el congelamiento de cables sin aislamiento.


  6. Carga de las baterías.

    Las capacidades de carga de los cargadores disponibles en la compañía-taller son insuficientes. Estaciones de carga locales son muy poco frecuentes.

    Propuesta:
    Asignación a cada compañía de un pequeño generador impulsado por un motor DKW, como los empleados por las tropas de comunicaciones, para que de esta forma las compañías sean independientes de la en muchas ocasiones muy alejada compañía-taller.


  7. Parabrisas anticongelante.

    Se encuentran actualmente unicamente disponibles para coches civiles. Los parabrisas de los camiones se congelan muy a menudo y ciegan al conductor lo que provoca frecuentes paradas.


  8. Protección antideslizante para carros de combate.

    No todos los carros de combate han podido ser equipados con los hasta ahora asignados tacos antideslizantes (Gleitschutzstollen). Sobre nieve compacta los tacos han sido empleados con éxito, en cambio sobre hielo los carros de combate equipados con ellos todavía resbalan con facilidad. Los tacos todavía no han podido ser probados sobre capas profundas de nieve.

    Los tacos poseen diferente grados de dureza del material, algo que ha podido constatarse en base al gran nivél de desgaste. Sobre carretera helada muchos tacos se han roto, las solapas se rompen con mucha frecuencia. Una compañía ha constatado que de un total de 670 tacos en el transcurso de la marcha se han perdido 240 tacos. Muchos tacos son demasiado blandos, han sido chafados y han aumentado su ancho. En tacos para Pz.Kpfw. I y II se han medido las siguientes dimensiones antes y despues de la marcha:

    Antes de la marcha:
    Altura 40 mm, superfície de agarre 6 x 40 mm = 240 mm2

    Despues de la marcha:
    Altura 28 mm, superfície de agarre 15 x 60 mm = 900 mm2

    Por lo general la altura de los tacos se ha desgastatado hasta la mitad y su superfície de agarre se ha cuatriplicado, por lo que estos tacos no ofrecen la suficiente seguridad de agarre.


  9. Repercusiones de los tacos antideslizantes sobre el vehículo.

    Sobre carretera helada así como cubierta con nieve los vehículos y tambien sus conductores han tenido que sufrir los contínuos impactos provocados por los tacos.

    Se ha sufrido un inusual alto número de roturas de eslabones y pasadores de cadena. Debido a los rápidos movimientos en los Pz.Kpfw III y IV los muelles han alcanzado muy altas temperaturas. En Pz.Kpfw III se han averiado varios amortiguadores telescópicos, algunos de ellos han alcanzado unas temperaturas tan altas que no podían ser tocados.

    Algunos de los amortiguadores averiados han sido enviados a la empresa productora (Boge & Söhne, Eitorf) para que allí sean inspeccionados. Tambien la empresa Daimler-Benz, Marienfelde, ha sido informada a través de su ingeniero de servício que se encuentra con nosotros.

    Si los contínuos impactos han afectado el ajuste del armamento no ha podido ser todavía evaluado.

    En relación al montaje de los tacos las mejores experiencias se han realizado cuando dos tacos son montados en un eslabón. Si los tacos son montados unicamente en un lateral de la cadena las ruedas son sobrecargadas unilateralmente.


  10. Resistencia de los chásis.

    Bajo la influencia del frío el material blindado, especialmente en las zonas de soldadura, se vuelve quebradizo, de forma que ante pequeños impactos, p.e. al chocar contra un árbol, se han producido grietas en la soldadura. En estos casos en algunos vehículos las completas transmisiones laterales han sufrido averías.

    En nuestra opinión las planchas del blindaje no están lo necesariamente fuerte soldadas entre sí.


  11. Bajas de carros de combate.

    Durante la marcha la División ha sufrido el siguiente número de bajas de carros de combate:

    28 Pz.Kpfw. I
    20 Pz.Kpfw. II
    5 Pz.Kpfw. III de un total de 15
    7 Pz.Kpfw. IV de un total de 16


    Estas bajas han sido provocadas en un 20 % por averías técnicas de carácter general, en un 20 % por averías provocadas por el frío y en un 60 % provocadas por accidentes ó bien deslizamientos sobre carretera helada.

    La reparación de estos vehículos depende en gran medida de la rápida asignación de recambios, algo que debido a la ordenada solicitación a través del Gen.Qu. no vá a suceder.


  12. Empleo de los servícios de reparación y mantenimiento.

    El empleo de estos servícios bajo las tan severas heladas y mientras no se disponga de los correspondientes alojamientos se vé en la práctica muy dificultado. La equipación de la compañía-taller con carpas de trabajo es urgente.






Firmado: Generalmajor